Los auzunistas lucharon hasta el último minuto pese a ir siempre a remolque del Egia
El esfuerzo del Eurocam Gure Auzune se quedó sin recompensa este sábado tras caer derrotado por 28-29 ante el Egia donostiarra en Divino Maestro. La que era la primera de las ocho finales que debe afrontar el Gure hasta final de temporada no pudo saldarse con nada positivo más allá de una nueva demostración de pundonor y carácter del equipo de Unai Rubio en la segunda parte tras unos primeros treinta minutos tirados por la borda.
La renovada plantilla auzunista, que este verano vivía una profunda renovación, se ha visto lastrada por las lesiones de jugadores referentes que le han llevado a ocupar la penúltima posición del grupo C de Primera Estatal y a estar inmersa en una carrera por evitar el descenso de categoría.
El Eurocam pretendía ante el Egia de aplicar el guión marcado por su entrenador en la víspera del choque pero no logró hacerlo hasta la segunda mitad. El técnico alavés había dejado claro el objetivo de evitar el juego al contraataque de los guipuzcoanos reduciendo al máximo las pérdidas y apuntalando el trabajo defensivo. Sin embargo, los auzunistas no lograban la firmeza necesaria en defensa y además cometía muchos errores en ataque que le permitían al Egia dominar en el marcador hasta llegar al descanso con un favorable 13-16.
Los del barrio de El Pilar salieron del vestuario convencidos de que las opciones de puntuar pasaban por mejorar en defensa y evitar que el marcador se fuera por encima de la treintena de goles en contra. Sin embargo, la mejoría en defensa fue de los dos equipos y en este panorama el Egia supo mantener las distancias a su favor con ventajas de entre dos y cuatro goles.
El joven central Haritz Pérez fue protagonista en la reacción auzunista tras el descanso, David Olivar se erigió en jefe de la defensa y Miguel Muñoz en la portería mantenía a su equipo en la pelea pese a la cantidad de rechaces regalados al Egia por la defensa gasteiztarra. hasta siete balones repelidos por el meta auzunista terminaron en una nueva oportunidad para el ataque donostiarra.
Con todo encarrilado hacia el bando visitante (25-29 min 26:16), el Eurocam Gure Auzune tuvo una reacción final de pundonor que apretó el marcador hasta el 28-29 final y llevó la emoción a las gradas de un Divino Maestro que volvió a volcarse con su equipo hasta el último balón, en el que los locales tuvieron la opción de empatar con el tiempo cumplido en un lanzamiento que paró la barrera.
«Tiramos la primera parte, olvidamos lo que teníamos que hacer y si no jugamos concentrados los 60 minutos no tenemos opciones. O peleamos como bloque o estamos perdidos, no debemos olvidarlo», resumía un contrariado Unai Rubio al final del partido.
La próxima jornada, el Eurocam Gure Auzune se enfrentará en Villaba al Beti-Onak el sábado a partir de las 18.00 horas. Los navarros son novenos con 22 puntos, muy por delante de los alaveses, que en la primera vuelta dieron la sorpresa al imponerse por 25-24 en Divino Maestro con una magnífica actuación de Ion Ander Elorza, ahora lesionado.
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